ÉRAMOS POCOS Y PARIÓ LA ABUELA
Escuché por ahí que hoy es el día del arquitecto y se me ocurrió homenajearlos. Pero antes, como no me sonaba mucho, revisé las listas que aparecieron acá por Mayo del año pasado, en la entrada "Those were the days" (de paso se las recomiendo, la verdad que está buena, parece escrita por otro. Claro, cuando uno visualiza la longitud de las listas dispara a la mierda, pero pueden pasarlas por alto y leer lo del principio, lo del medio y lo del final nada más, si quieren), y resulta que el día del arquitecto no existe, ni en la internacional ni en la made in casa. O sea, que nos volvieron a joder y nos encajaron otro día más para manotearnos el bolsillo.
Así que se me fueron un poco las ganas de hacer el homenaje, pero después me di cuenta de la importancia de seguir adelante con la idea. No sólo porque el Chico Buarque es un genio, sino también para demostrarle al mundo, y en especial a la Cámara de Comercio, que no es necesario gastar plata en una boludecita para quedar bien en cada Día D. Alcanza con estrujar un poco el caletre, hacerse el intelectual compatriota y contemporáneo y pergeñar cosas como ésta.
Además Mariana, una de mis nietas favoritas y futura arquitectita, se merece el homenaje.
Ahí va.
CHICO BUARQUE DE HOLANDA
CONSTRUÇAO
Amou daquela vez como se fosse a última
Beijou sua mulher como se fosse a última
E cada filho seu como se fosse o único
E atravessou a rua com seu passo tímido
Subiu a construção como se fosse máquina
Ergueu no patamar quatro paredes sólidas
Tijolo com tijolo num desenho mágico
Seus olhos embotados de cimento e lágrima
Sentou pra descansar como se fosse sábado
Comeu feijão com arroz como se fosse um príncipe
Bebeu e soluçou como se fosse um náufrago
Dançou e gargalhou como se ouvisse música
E tropeçou no céu como se fosse um bêbado
E flutuou no ar como se fosse um pássaro
E se acabou no chão feito um pacote flácido
Agonizou no meio do passeio público
Morreu na contramão atrapalhando o tráfego
Amou daquela vez como se fosse o último
Beijou sua mulher como se fosse a única
E cada filho seu como se fosse o pródigo
E atravessou a rua com seu passo bêbado
Subiu a construção como se fosse sólido
Ergueu no patamar quatro paredes mágicas
Tijolo com tijolo num desenho lógico
Seus olhos embotados de cimento e tráfego
Sentou pra descansar como se fosse um príncipe
Comeu feijão com arroz como se fosse o máximo
Bebeu e soluçou como se fosse máquina
Dançou e gargalhou como se fosse o próximo
E tropeçou no céu como se ouvisse música
E flutuou no ar como se fosse sábado
E se acabou no chão feito um pacote tímido
Agonizou no meio do passeio náufrago
Morreu na contramão atrapalhando o público
Amou daquela vez como se fosse máquina
Beijou sua mulher como se fosse lógico
Ergueu no patamar quatro paredes flácidas
Sentou pra descansar como se fosse um pássaro
E flutuou no ar como se fosse um príncipe
E se acabou no chão feito um pacote bêbado
Morreu na contra-mão atrapalhando o sábado
Construcción
Amó aquella vez como si fuese la última,
Besó a su mujer como si fuese la última,
Y a cada hijo suyo cual si fuese el único
Y atravesó la calle con su paso tímido.
Subió a la construcción como si fuese máquina,
Irguió en el armazón cuatro paredes sólidas,
Ladrillo con ladrillo en un diseño mágico,
Sus ojos embotados de cemento y lágrimas.
Se sentó a descansar como si fuese sábado,
Comió feijão y arroz cual si fuese un príncipe,
Bebió y sollozó como si fuese un náufrago,
Danzó y carcajeó como si oyese música
Y tropezó en el cielo con su paso alcohólico.
Y flotó por el aire cual si fuese un pájaro.
Y acabó en el suelo como un bulto fláccido.
Agonizó en el medio del paseo público.
Murió a contramano interfiriendo el tránsito.
Amó aquella vez como si fuese el último,
Besó a su mujer como si fuese única,
Y a cada hijo suyo cual si fuese el pródigo
Y atravesó la calle con su paso alcohólico.
Subió a la construcción como si fuese sólida,
Irguió en el armazón cuatro paredes mágicas,
Ladrillo con ladrillo en un diseño lógico,
Sus ojos embotados de cemento y tránsito.
Se sentó a descansar como si fuese un príncipe,
Comió feijão y arroz como si fuese el máximo,
Bebió y sollozó como si fuese máquina,
Danzó y carcajeó como si fuese el próximo
Y tropezó en el cielo cual si oyese música.
Y flotó por el aire cual si fuese sábado,
Y terminó en el suelo como un bulto tímido.
Agonizó en el medio del paseo náufrago.
Murió a contramano interfiriendo el público.
Amó aquella vez como si fuese máquina,
Besó a su mujer como si fuese lógico,
Irguió en el armazón cuatro paredes flácidas,
Se sentó a descansar como si fuese un pájaro,
Y flotó en el aire cual si fuese un príncipe,
Y terminó en el suelo como un bulto alcohólico.
Murió a contramano interfiriendo el sábado.